Predigital

En esta sección presento una estricta selección de las fotos realizadas entre 1983 y 2004. Resumir veintiún años en menos de cien imágenes imponía un filtraje radical. La selección es discutible incluso para mí pero toda selección de esta envergadura está condenada a serlo. Hice las fotos originales con película diapositiva, habitualmente Fujichrome iso 100 o Ektachrome iso 100. Usé un desfile de cámaras manuales y semiautomáticas Pentax (modelos ME, MX y similares) y objetivos baratos 28-70 mms. y 70-200mms. Tamrom. Salvo excepciones, todo eso lo compraba de segunda mano ya que mis penurias económicas no permitían mayores alardes.
He digitalizado estas diapositivas mediante un cacharro que yo mismo me fabriqué con cuatro cachos de madera, una pantalla difusora (por transparencia) y mi compacta Canon G11. Por eso no te extrañe que ni los colores ni la calidad sea todo lo buena que podría ser con mejor material. En esta galería, las temáticas están mezcladas y no sigo ningún orden cronológico o de otra índole, por lo cual esta es una “galería fija” aunque no descarto ir introduciendo en ella algunas imágenes más, de vez en cuando.
Aviso: Ya sabes que, en cada pantalla las fotos se ven entre algo y muy distintas. Debido a ello puede que mis imágenes aparezcan demasiado claras u oscuras, sobresaturadas de color o decoloradas. Te las presento, pues, a título de aproximación.


“ Paraísos para el alma “
Erg Chebbi, Marruecos (Mayo 2002)
Siento debilidad por los desiertos. No solo son tesoros fotográficos ilimitados si no uno de los ecosistemas donde más fácilmente se pacifica mi espíritu. Sus buenas imágenes me son más caras que otras buenas imágenes.


“ Palacio invernal “
Les Agudes, Montseny, Barcelona (Febrero 1986)
Yo tenía veintiún años cuando, junto con un amigo de por aquel entonces, realizamos una ascensión invernal a las modestas cimas de Les Agudes. La noche anterior había caído cantidad de nieve y las nubes se filtraban en el bosque. Aunque el avance era difícil parecía que caminásemos por unos salones helados. Muy grata experiencia.


“ Bodegón con neumáticos “
Langenes, Noruega (Julio 1999)
Los años que han pasado desde aquel primer viaje ornitológico y fotográfico a Noruega, visten su recuerdo de un halo dorado. Miquel y yo empezábamos a descubrir geografías y culturas muy distintas de aquellas en las que había transcurrido nuestra infancia y buena parte de la juventud. Eso nos llevaba de asombro en asombro y, aunque todavía nos asombramos cuando viajamos, ya no volverá a ser lo mismo.


“ Escena goyesca “
Ciutat Vella, Barcelona (Septiembre 1998)
Subido a una farola para conseguir un punto de vista elevado, realicé está foto aprovechando la fuerte luz de la pólvora. El resultado siempre me ha recordado una escena creada por el famoso pintor.


“ Fugaz furgoneta del amanecer “
Castelló d´Empuries, Girona (Febrero 2002)
Sara, Miquel y yo llegamos a las cercanías de los Aiguamolls de l ´Empordà justo cuando estaba en su apogeo uno de los amaneceres más rojos que recuerdo. El lugar era muy poco fotogénico pero un soplo de inspiración me movió a hacer esta foto.


“ Arenas de Trunvel “
Bretaña francesa (Enero 1999)
Otro filón que periódicamente me lleva a viajar es la belleza de las costas del Atlántico. Normalmente vamos a la costa Cantábrica o a Galicia pero esta foto procede de un pequeño viaje, medio fotográfico y medio ornitológico, que hicimos Miquel y yo por el recortado litoral de la Bretaña francesa.


“ El instante “
Blanes, Girona (Julio 1984)
Hice esta foto hace veintiséis años y, francamente, ya no recuerdo nada. Si tuviere que suponer algo, supondría que me percaté de la composición en líneas horizontales y vi venir el niño con la colchoneta. Esperé a que se levantase una ola y disparé. Por aquel entonces me lo tenía que pensar tres veces antes de oprimir el obturador porque mi economía era precaria (aunque hacia dos años que trabajaba en el taller de mis padres) y los carretes, en esa situación, me salían caros.


“ Textura y figura “
Desde casa, Barcelona (Diciembre 1999)
Salí al terrado para ver qué es lo que podía hacer con la bendición de una de las poco usuales nevadas en Barcelona. Hice fotos más convencionales pero cuando observé venir la gaviota supe que está era la buena.


“ The Cape Storm “
Olifantsbaai, Provincia de El Cabo, Sudáfrica (Octubre 2003)
Era la primera vez que salía de la eco-región europea (el Paleártico occidental). Me costó dos años de dura disciplina reunir el dinero para este ya mítico viaje. Hacía dos días que habíamos llegado y todo me maravillaba. Mientras observábamos aves en esta playa se cernió sobre nosotros una tormenta subtropical. Quizás la calidad de la foto no hace justicia a la hermosa sensación del recuerdo, pero a mí me transporta a entonces cada vez que la miro.


“ Muerte boreal “
Stabbursdalen, Norte de Noruega (Agosto 1999)
Pienso que la fotografía puede ser buena sin estar obligada a lograr un efecto agradable. Incluso puede ser buena siendo abiertamente desagradable. Y si no que se lo pregunten a los reporteros de guerra cuyas estampas de masacres no parar de ganar premios. Algunos de ellos viven mucho más del morbo que de la fotografía pero en este mundo traidor todo se confunde. ¿Pero puedo negar que, en esta foto, el mero horror y/o el asquito no añaden interés a la composición? Honestamente, no puedo.


“ Ojos de torrente “
Coma de vaca, Girona (Diciembre 1990)
Caminaba sobre la nieve honda, recién caída, y me encontre devolviéndole la mirada invertida a este arroyo que había quedado enterrado. Ya por entonces soplaba el minimalismo en mi espíritu así que la foto estaba servida.


“ Cuatricolor “
Playa de Las Conchas, La Graciosa, Canarias (Julio 2000)
En el verano del año dos mil hice un viaje en solitario por el archipiélago canario en busca - de qué si no – de aves y fotos. Así es como llegué al más remoto extremo de la pequeña isla de La Graciosa y me encontré con esta orgía cromática. Los seis kilómetros que caminé para llegar allí, cargado como siempre con la mochila y el trípode con el telescopio montado, ya solo por esta foto me valieron la pena.


“ Y un huevo “
En casa, Barcelona (Marzo 2002)
No suelo hacer montajes de estudio - entre otras razones porque no tengo estudio - pero muy de tarde en tarde me da por ahí. Mi vena satírica y mi inconformismo congénito se aliaron para expresarse en esta imagen. La mano es de Sara, pero no sé qué gallina puso el huevo.


“ Alegoría sobre la libertad “
En casa, Barcelona (Marzo 2002)
Menos satírica y más conceptual es esta pequeña performance con la que expreso lo difícil que es el ejercicio de la libertad. En tu mano está obrar pero también en tu mano están los problemas. La mano de la foto, en concreto, es mía.


“ Vencejo y su reflejo “
Delta del Ebro, Tarragona (Mayo 1991)
En 1991, durante un par de excursiones con el DEPANA, quedó depositado en mí el germen de la locura ornitológica. Por aquel entonces no tenía equipo apto para intentar buenas fotografías de aves así que mis enfoques eran otros.


“ La dama del lago “
Montjuïc, Barcelona (Junio 1997)
Visto con el sol de espaldas, esta ninfa no antropomorfa era un mero cono de algas verdosas. Pero a contraluz se delataban su formas y las algas devenían velo.


“ Cuchillos de hielo “
Valle de Estós, Huesca (Abril 1992)
Cuando el agua se hiela, puede aparecer cualquier cosa, cualquier forma. El hielo es una fuente de sorpresas estética de primer orden y, siempre que el frío me encuentra en el campo, lo busco para ver qué es lo que ha hecho esta vez.


“ Desfile marciano “
Cap de Creus, Girona (Marzo 1997)
Vienen por las lomas, en fila de a uno. Son altos, son eléctricos y están aquí para quedarse.


“ Fauna urbana “
Las Ramblas, Barcelona (Diciembre 1991)
Hace diecinueve años Las Ramblas eran más del barrio y menos de los turistas. La normativa municipal, por desidia o por genuina tolerancia, no coartaba demasiado la libre expresión ciudadana y, aunque sus tiempos mítico-canalla-bohemios ya habían quedado atrás, todavía flotaba el aroma de un pretérito más espontáneo. Hoy son un escaparate como tantos donde millares de turistas ven mayormente otros turistas viendo turistas en un juego de espejos asaz absurdo.


“ Friso de renos “
Gamvik, Norte de Noruega (Agosto 1999)
Allí, las ovejas se pelarían de frío. Por eso el ganado semi-doméstico son los renos. En esta foto posaron bien ordenados (o me situé correctamente).


“ Luces diurnas “
Ciutat Vella, Barcelona (Agosto 1993)
Tras décadas de obsesivo ejercicio fotográfico uno camina mirando a todas partes, aun al azar. Solo así se pueden ver encuadres como este donde unos cuantos elementos, bien mirados, se estructuran con suficiente interés como para que valga la foto.


“ Velocidades “
Bosque de Iratí, Navarra (Octubre 2000)
La velocidad con que se mueve un haya (ninguna que nos sea perceptible), la velocidad con que fluye el agua… todo son velocidades. Como fotógrafo, uno adquiere mayor conciencia de la velocidad ya que en ello le va captar lo que ve o expresar lo que capta.


“ Tres puntos amarillos “
Plaça Espanya, Barcelona (Agosto 1993)
Tres puntos amarillos a tres distancias distintas y formando un triángulo que se sobrepone al resto de una composición que, sin ellos, sería menos interesante.


“ Hágase la foto “
Colera, Girona (Marzo 2001)
El paisaje de la zona era muy agradable pero no acababa de encontrar una composición que valiese la pena. Me dediqué a retratar detalles geológicos pero eso no era una solución a nivel macroscópico. Así que se me ocurrió la idea - no sé como - de pedirle a Sara que pusiera la mano. Y por obra de ella la foto se hizo.


“ Terrible hermosura “
Erg Chebbi, Marruecos (Mayo 2002)
Resulta paradójico que un entorno tan bello sea tan hostil. Esa sinfonía de tonalidades de naranja asalmonado puede matarte si te quedas dos días sin sombra y sin agua. El Erg Chebbi solo es una pequeña extensión de dunas altas; muy mal te lo tienes que montar para fallecer en él. Sara, Miquel y yo lo visitamos, cámaras en ristre, al atardecer ya que, a mediodía, no es ni la mitad de bonito y sí mucho más caluroso.


“ Existía “
Navarra (Octubre 2000)
Pocas veces uno se encuentra con una estampa de un bucolismo tan exagerado. En nuestro país cada vez es más difícil ya que la explotación extensiva de la agricultura y la ganadería está creando un paisaje que, si hay suerte, le parecerá bucólico a nuestros nietos. Cuando, nueve años después, volví a pasar por este sitio, unas grandes naves de plástico y metal habían mancillado la escena que ahora os muestro. Y que ya es historia.


“ Rayos y centellas “
Desde casa, Barcelona (Septiembre 1994)
Esta vez ni siquiera hube de exponer mi testa a las iras celestes; la tempestad se ubicó tan oportunamente que pude disparar desde la relativa seguridad de mi ventana.


“ La migración de los guijarros “
Aiguamolls de l ´Empordà, Girona (Abril 1996)
Ellos no se movían, era la arena superficial de la playa la que fluía impulsada por la tramontana, dejando tras las piedras una estela, como de barquitos en la mar. El efecto me pareció tan singular como simpático; una pequeña broma de la naturaleza.


“ Paralímpicos aplaudiendo “
Montjuïc, Barcelona (Septiembre 1992)
Si atendemos al contraste entre la esforzadísima pose del atleta y la boba laxitud del matrimonio que le aplaude, no caben dudas de quien es aquí el paralímpico… Debo recordar lo fácil que resulta aparecer como un tonto en las fotos ¡Aun sin serlo!


" Animalico de hojarasca "
Bosque de Irati, Navarra (Octubre 1999)
Pariente de los guijarros migratorios, el hojarasco es una entidad fortuita creada por agregación paulatina de hojas secas contra una piedra. La corriente del río nos ofrece una ilusión de avance.


“ Tapicería naturalizada “
Aiguamolls de l ´Empordà, Girona (Abril 1996)
He aquí otro bello ejemplo de cómo los procesos naturales crean agradables detalles durante su paciente labor para asimilar nuestros deperdicios. Se trata de un fenómeno muy similar al que muestro en la foto “ Bodegón árido ” (Galería “Diversos”).


“ Abstracción fluvial “
Sant Celoni, Barcelona (Octubre 1993)
Caminando junto a la orilla de un modesto torrente y buscando una composición que no fuera de las más habituales, me topé con este encuadre que, si más no, reflejaba muy bien el ambiente y la luz de que discurría bajo el bosque otoñal.


“ Dorando el agua “
Montjuïc, Barcelona (Junio 1997)
El sol ya se marchaba, pero sus rayos quedaron atrapados entre las rejas de estos surtidores.


“ Merecida bendición “
Puigmal, Girona (Diciembre 1990)
Esta foto está realizada tras la noche más dura de mi curriculo como montañero. Su breve historia es esta. Llegué al Puigmal d´Er a media tarde tras subir desde Nuria mientras el día se encapotaba. Cansado, decidí dejar para mañana la subida al otro Puigmal, el de Llo - menos conocido - y vivaquear bajo una roca que encontré cerca del collado entre el de Er y el Pic de Segre. Antes de anochecer ya empezó a nevar y no paró hasta las 5,00h. de la madrugada. Por aquel entonces todavía llevaba mi saco de verano y un montón de pijamas a modo de ropa de abrigo. La funda de vivac y los -9º C evitaron que me mojase pero quedé enterrado en una duna de nieve que se fue formando sobre mi precario refugio. No pasé excesivo frío pero tampoco logré pegar ojo en toda la noche, que fue muy larga. Cuando ceso la nevada, despejó rápidamente, la temperatura bajó hasta -14ºC y yo salí de mi crisálida para hacer esta foto. Las luces (fluorescentes) del alumbrado público de Bourgmadame, en la Cerdanya francesa, iluminaban desde abajo una capa de nubes bajas y las estrellas relucían sobre ellas como clavos de hielo. Aterido pero contento, recogí mis bártulos y me dispuse a regresar a Nuria antes de que el tiempo volviese a empeorar. El Puigmal de Llo quedó para otra ocasión.


“ Diablos de la zanahoria “
Pl. Sant Jaume, Barcelona (Septiembre 1986)
Ponerle cuernos a una capucha es difícil si no dominas un poco el tema de las manualidades y los materiales. A mí siempre me pareció que estos “diables”, en un “Correfocs” de hace ya veinticuatro años, debían descender de los conejos, a juzgar por las zanahorias que llevaban por cornamenta.


“ Verde sobre verde “
L´Estany, Barcelona (Mayo 1997)
Cuando pensamos en camuflajes, solemos imaginarnos jaspeados de marrón o de gris. Claro que, si vives entre hojas de un verde subido, más te vale cambiar de chaqueta. Nunca consigo distinguir bien la Ranita meridional de la de San Antón, pero te aseguro que el sujeto de esta foto es una de las dos.


“ No postal “
Sant Llorenç de Montgai, Lleida (Febrero 1999)
Podía haber elegido una imagen más convencional, sin todas esas ramas que parecen estorbar la serenidad del anochecer. Pero creí mejor usarlas para generar un primer plano caótico que encaminaba al ojo hacía la derecha, en dirección a la luz más intensa y la ordenada fila de chopos.


“ Ocho copas “
Villa Olímpica, Barcelona (Abril 1998)
Todavía era temprano para abrir el restaurante pero el servicio de mesa ya aguardaba, primorosamente alineado y contemplando el litoral urbano.


“ Gigantes suecos “
Isla de Öland, Sur de Suecia (Septiembre 1999)
En la playa de Kapelluden, durante el largo ocaso estival de esas latitudes, nuestras sombras se alargan, microcéfalas y zanquilargas. Se nota que estábamos de buen humor…


“ Ca l ´Allaud “
Valle del Freser, Girona (Marzo 1996)
La calidad de la foto en sí, quizás no justifique haberla seleccionado pero como es chocante y Miquel y yo fuimos los artífices de esa habitación, decidí mostrarla. El caso es que un gran alud había caído desde uno de los barrancos del Pic de Balandrau y había cubierto este sector del valle con gruesos de nieve superiores a los 10 metros. Yo había visto el lugar cuando pasé para subir a Coma de Vaca y a la semana siguiente regresé con Miquel, un cubo de plástico, una pala, un serrucho y dos piolets para dedicar toda una jornada a horadar ese cuartito donde, exhaustos de tanto cavar, pasamos la noche. La ocurrencia no estuvo completa hasta que, de madrugada, me levanté para inmortalizar nuestra efímera obra.


“ Banco barcelonés “
La Barceloneta, Barcelona (Abril 1994)
Ignoro si este diseño de banco público se encuentra en otras ciudades de la península o del mundo pero desde luego, es típico de Barcelona. A contraluz, sus amables curvas se delatan mejor.


“ Niño con perro “
Asturias (Julio 1997)
Aquel verano, Miquel y yo planeamos el que sería nuestro primer viaje juntos. Por entonces la afición ornitológica acaba de brotar y trazamos la ruta de este recorrido por la cornisa cantábrica en función de los lugares que, tras informarnos, nos parecieron más prometedores en lo fotogénico. Un año después, el itinerario ya vendría dictado por los enclaves de interés ornitológico.


“ Tras el chubasco “
Iratí, Navarra (Octubre 2001)
Esta vez éramos cuatro los que fuimos para allá; Sara, Miquel, Enric y yo. En el Collado Orión cayó un aguacero que nos obligó a refugiarnos en el coche pero en cuanto pasó recibimos el obsequio de un atardecer exquisito.


“ Cronolíneas “
Poble Nou, Barcelona (Febrero 1983)
La nieve que caía iba cubriendo las roderas que los vehículos trazaban sobre la nieve ya caída de manera que aparecían más tenues cuanto menos recientes eran. Así se fue dibujando un mapa de rastros que, poéticamente, registraban el tránsito.


“ Otoño acuático “
Sant Celoni, Barcelona (Octubre 1993)
Es lo contrario de las cataratas Victoria; un ínfimo rinconcillo anónimo donde la belleza fluye plácida y todo lo que le falta de grandeza lo suple en armonía.


“ La humildad de la hierba “
Taradell de Montrodón, Vic (Abril 1984)
En un día nublado de primavera, el talud se viste de graciosos perfiles vegetales, plantas que durarán escasos meses, los justos para dispersar sus semillas y volver a vestir el talud un año después.


“ Caprichos de la marea “
Isla de lobos, Fuerteventura (Julio 2000)
La roca de base se hallaba muy ligeramente ondulada lo cual determinó que los guijarros y piedrecitas, al retirarse la marea, se ordenasen en hileras siguiendo los leves surcos.


“ Batisielles “
Valle de Estós, Benasque, Huesca (Septiembre 2001)
Siendo una cordillera modesta si la comparamos con los Alpes y ya no digamos con los Andes, los Pirineos me han deparado grandes imágenes y muy gratas excursiones. Pequeñas joyas como este laguito no son difíciles de hallar.


“ Cara a cara “
Ciutat Vella, Barcelona (Mayo 2000)
En los estrechos callejones del casco antiguo de Barcelona han empezado a aparecer modernos edificios que contrastan con la vieja arquitectura. En esta imagen, un panel de vidrio refleja la casa de enfrente, mal conservada. Pero la casa nueva la pintaron de cualquier manera y dudo mucho que aguante lo que aguanto la vieja.


“ Desde dentro “
Montjuïc, Barcelona (Enero 2001)
Visité el jardín botánico “Mn. Costa i Lloveras” y me metí dentro de un enorme macizo de cactus para ver si ahí me aguardaba una foto. Por fortuna, así fue y los pinchazos (pocos y superficiales) valieron la pena.


“ El zen del hayedo “
Egergoa, Bosque de Iratí, Navarra (Octubre 2000)
Cualquier fotógrafo y/o amante de la naturaleza que viva en un radio menor de dos mil kilómetros debería peregrinar, al menos una vez en su vida, hasta el bosque de Irati. No conozco un hayedo que exprese mejor el concepto de la estética forestal.


“ Viajero derrotado “
Ciutat vella, Barcelona (Marzo 2004)
El barrio del Call (antiguo barrio judío de la ciudad medieval) nunca ha dejado de ser una especie de puerto transitorio para pecios humanos errantes. No es un espectáculo que alegre el ánimo pero impide que me olvide de la mucha gente desgraciada que nuestro sistema social genera. Hay barrios más asépticos y agradables, pero en el mío este aspecto de la realidad no se deja obviar.


“ Ni pintado “
Saldes, Barcelona (Abril 1986)
Integrado en los suaves claroscuros de la nieve, este pueblecito nos remite a los de los cuentos tradicionales. Cuentos que nos remiten a un mundo (básicamente, el imaginario) donde todo responde a la escala humana y el Corte Inglés deviene inconcebible.


“ Procesión crustácea “
Punta de la Rasca, Tenerife (Julio 2000)
Bien agarrados a la roca justo donde rompe la ola, los cangrejos permanecían impávidos ante los embates del mar. Sin embargo, la faena fue mía para retratarlos sin que huyeran pues con mi modesto objetivo de 200 mms. necesitaba acercarme mucho para hacer una toma como esta. Finalmente solo la más estricta inmovilidad, mantenida durante más de diez minutos, los convenció de que yo era un inofensivo relieve de la costa.


“ Fin del mundo “
Ciutat Vella, Barcelona (Agosto 2008)
Bueno, la verdad es que el título exagera ya que solo se trata del fin del día pero, eso sí; un final exquisitamente apocalíptico.

1 comentario:

  1. Me he introducido en esta galería con el típico ánimo escéptico internáutico que me caracterizan, pero debo reconocer que el paseo por esos 21 años predigitales valen mucho la pena. Quizá influye que esa historia implicita que palpita en cada foto es también de una pequeña (pero significativa)forma mi propia historia, esa que hemos compartido, debatido y disfrutado en decenas de encuentros. Pero no, no es solo eso. Siempre he sabido que la fotografía es tu DON más evidente (entre otros muchos) y tu forma de expresión más lograda y sólida.
    Aquí presentas una selección realmente excepcional. Cada foto penetra el misterio de la belleza con maestría y sutileza, eso sí, no son aptas para miradas distraidas o apremiantes, requieren serenidad para darse al espíritu en toda su dimensión. Aconsejo escuchar a Bob Dylan mientras se contemplan (sí, no se porqué en mi espíritu ambas cosas se potencian y subliman juntas)..quizá por ese rastro de nostalgia, misticismo naturalista, crítica socio-filosófica e inspiración que ambos comparten. en fin, que se yo, que felicidades.
    P.R.

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